El imperio de redes sociales vuelve a tropezar con la regulación europea. La Comisión Europea ha comunicado que iniciará una investigación sobre las plataformas de Meta, especialmente Facebook e Instagram, por dudar sobre la eficacia de sus protecciones a los menores y sospechar que sus RRSS fomentan las tendencias adictivas.
Desde la UE, temen que «los sistemas de Facebook e Instagram, incluidos sus algoritmos, puedan estimular adicciones conductuales en los niños, así como crear los llamados ‘efectos de madriguera de conejo’«, a lo que se añaden preocupaciones ante «los métodos de verificación y verificación de la edad implementados por Meta».
Esta investigación llega en contexto de la activación de la Digital Services Act (DSA) o Ley de Servicios Digitales, herramienta con la que la Unión está poniendo coto a las actividades de grandes multinacionales estadounidenses como la que preside Mark Zuckerberg. Además, los reguladores europeos ya iniciaron una investigación a finales de abril por sospechar que Facebook no tuvo el suficiente cuidado sobre las noticias falsas, difundidas durante la campaña por las elecciones al Parlamento Europeo.
Es un asunto en el que las fake news juegan un papel importante. También se han realizado estudios sobre la influencia de estas madrigueras sobre la polarización política, ya que en ocasiones estas sugerencias de contenido envían al mensajes con fuerte carga emocional negativa o contenido político extremo.
No se trata de un término nuevo. Ya estaba presente en artículos académicos de 2022, y se han realizado investigaciones sobre el uso de estos en diversas redes sociales, como este de 2023 que determinó que, aunque no encontraron presencia de madrigueras de conejo en YouTube, la red si que favorecía la polarización política con sugerencias de contenidos extremos.