La sombra de la ralentización que sufrieron los iPhone 6, 6 Plus, 6S y 6S Plus es muy alargada, y Apple todavía está pagando los platos rotos. Estos terminales están afectados por problemas de fiabilidad en sus baterías, y Apple decidió ralentizarlos para evitar posibles problemas, reduciendo la frecuencia máxima del procesador para reducir el estrés de las baterías. Esto no fue avisado a los clientes, y ahora les han obligado a informar de que eso fue así.
Apple ralentizó sus iPhone, y ahora debe informar de ello en su web italiana
La reducción de frecuencia en el procesador fue introducida en iOS 10.2.1, y Apple no informó a los s sobre ello en el listado de cambios, ni tampoco ofrecía una alternativa a quienes no quisieran que sus terminales empezasen a ir más lentos. Por ese motivo, Apple perdió una demanda en Italia en 2018 donde se le acusaba de no haber informado adecuadamente.
El mensaje anterior se puede consultar en la página principal de Apple Italia en este enlace, yendo al final de la página web. Esto sólo está presente en la versión italiana, mientras que en otros países europeos Apple no está obligada a mostrar esa información.
En el caso de que Apple hubiera sido transparente con este fallo desde el principio, se habrían ahorrado tener que pagar la multa y tener que poner ese mensaje en la web. Sin embargo, han preferido hacer lo que hacen siempre con los fallos de hardware y diseño de sus productos: callarse y arreglarlo en versiones posteriores, donde los consumidores se verán animados a seguir comprando sus productos a pesar de que los anteriores le hubieran fallado. El caso más reciente lo encontramos con las pantallas y teclados de los MacBook Pro, los cuales presentan fallos de durabilidad que Apple no ha itido en ningún momento.